Dime la antigüedad de tu vivienda y te diré los riesgos eléctricos que puedes estar corriendo
Cuando alguien está buscando comprar o rentar alguna casa o departamento, generalmente lo primero y más importante que se revisa es la ubicación, el número de habitaciones con las que cuenta el inmueble, la calidad de los materiales en las paredes o pisos y cuánta luz natural hay en cada espacio, entre otros, pero son solamente detalles superficiales. Sin embargo, pasa inadvertida una de las inspecciones más importantes para mantener a los habitantes seguros y a sus equipos protegidos: la instalación eléctrica.
De acuerdo con el Centro Nacional de Prevención de Desastres, es recomendable verificar que la instalación eléctrica se encuentre en buenas condiciones y en caso de que presente daños, realizar trabajos correctivos, debido a que el 11.4% de incendios en el hogar se originan por fallas eléctricas.
Por esta razón, conocer la antigüedad, así como la calidad del sistema eléctrico del inmueble, se ha convertido en un factor de vital importancia. Actualmente ya existen soluciones para el mantenimiento o supervisión de la instalación eléctrica, trayendo como beneficio la seguridad de toda la familia y también de los equipos conectados.
“Estamos en una era digital, el uso de la energía se ha vuelvo indispensable. Todo lo que realizamos en nuestro día a día toca un punto que implica el uso de electricidad y aunque es de vital importancia, en ocasiones es uno de los factores que menos se revisa dentro del hogar. Cosas que pueden parecer sin relevancia para algunos como una pequeña chispa al conectar un aparato electrónico, regulaciones en la intensidad de luz, o si su inmueble es mayor a 10 años, son los detonantes para que un experto revise la instalación, por seguridad de la familia”, comentó Oscar Lambert, vicepresidente de la división de Home and Distribution de Schneider Electric México y Centroamérica.